Fui hombre y un hombre malo. Mi enemigo esperó 200 años para encontrarse de vuelta conmigo. Ahora, reencarnada en un cuerpo de cuarenta y tanto kilos y tatuajes diversos.
¿Así que solo quieres molestarme? Extraña manera si resumimos que tu comportamiento paranormal básicamente se remite a mover sombreros y bastones- cuál es tu fijación, querido?. Aún así sabes que lo lograste y alimentas mis miedos.
Y ahora que sé que fui un hombre malo y que lo que te hice fue tan grave que después de tantos años no puedes dejarme ir... me asaltan las siguientes preguntas: ¿Quién fui? ¿Qué te hice?
O, más sentato aún: ¿ Debo creer todo lo que me dicen?
Doctor O ( preferimos no revelar nombres en un tema tan delicado), sírvase no bromear con esta clase de asuntos . Si en realidad es lo que es y sabe lo que sabe, debe tener por asumido que además de hipocondriaca, creo todo lo que me dicen.
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